Solucionar la inflamación crónica o el exceso de inflamación es uno de los retos actuales para mejorar la salud de la población.
Existen factores relacionados al estilo de vida actual que aumentan el riesgo de padecer la citada inflamación crónica tal como el estrés, la mala alimentación, el tabaco, las toxinas en el aire que respiramos o en el agua que bebemos, y el propio envejecimiento.
La inflamación es culpable de causar o agravar patologías como la artritis, la diabetes, la enfermedad cardiovascular, el cáncer o el alzheimer. Afortunadamente no todo es tan negro ya que la Naturaleza pone al alcance de nuestra mano remedios como por ejemplo, distintas especias.
En esta ocasión vamos a hablar de la cúrcuma por su alto poder antiinflamatorio entre otros beneficios.
Esta es una especia muy común en la cocina hindú y la del oriente medio. Además de ser utilizada para darle sabor a las comidas, también ha sido usada durante siglos en la medicina china y en la ayurvédica. Se le conocen propiedades antiinflamatorias (1), antifúngicas, antibacterianas, antisépticas y además es un gran antioxidante.
Los beneficios de la cúrcuma son en su mayor parte debidos a los curcuminoides que contiene, siendo el más común la curcumina.
El daño oxidativo está detrás del envejecimiento y de algunas enfermedades crónicas. La curcumina además de un potente antiinflamatorio, es un gran antioxidante que puede neutralizar los radicales libres que producen el daño oxidativo y aumenta la actividad de las enzimas antioxidantes del cuerpo.
Además, usándola sencillamente como un condimento de la comida, ha demostrado otros beneficios como reducir los niveles de colesterol. Otras investigaciones (2) demuestran también sus beneficios en el control de la insulina y del azúcar en sangre.
Respecto al exceso de peso, tomar una cucharadita de cúrcuma al día ha demostrado ayudar a controlarlo. Un estudio demostró que esta especia inhibe el proceso de convertir el exceso de energía en deposito graso en el organismo, lo que podría ser un mecanismo de control de peso. (3)
La ventaja es que puedes incorporar fácilmente los citados beneficios incluyendo esta especia en tus platos. Por ejemplo, si la añades a las verduras, estarás aumentando el potencial antioxidante de las mismas.
Hay que tener en cuenta que esta especia se absorbe mal, aunque al cocinarla en medio graso (con aceite de oliva) o complementándola con pimienta negra, mejorarás su absorción.
Cuando compres el «polvo de cúrcuma», asegúrate que sea lo más fresco posible. Fíjate en la fecha de envasado y no la guardes demasiado tiempo en la despensa, ya que se oxida fácilmente perdiendo parte de sus beneficios.
Queremos proponerte una forma de incorporar la cúrcuma a tus platos. Hoy vamos a compartir contigo la receta de Ternera Guisada en Cúrcuma, Jengibre y Leche De Coco de Health&Go:
Ingredientes para una ración: 160 g de filete de ternera troceada , ¼ cebolla pequeña (unos 40g), tomate (unos 20g),10g de jengibre, una pizca de cúrcuma, 2,5 cucharadas de bebida de coco (40 ml) y 1,5 cucharaditas de aceite de oliva.
Elaboración: Pochamos la cebolla, y le añadimos la carne, el jengibre, el tomate y la cúrcuma. Dejamos cocer hasta que la carne esté tierna y entonces añadimos la leche de coco, para luego dejar que cueza unos minutos más.
La evidencia científica demuestra día a día el potencial de la alimentación saludable frente a la enfermedad, pero si además añadimos especias como la cúrcuma a la ecuación alimentaria, el resultado será muy beneficioso.
Paula Saiz de Bustamante
Farmacéutica Especialista en Nutrición.
Para Health&Go
- Jurenka, Julie S. “Anti-inflammatory properties of curcumin, a major constituent of Curcuma longa: a review of preclinical and clinical research.” Alternative medicine review 14.2 (2009).
- Anti-Hyperglycemic and Insulin Sensitizer Effects of Turmeric and Its Principle Constituent Curcumin (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4338652/)
- (3) Ejaz, Asma, et al. “Curcumin inhibits adipogenesis in 3T3-L1 adipocytes and angiogenesis and obesity in C57/BL mice.” The Journal of nutrition139.5 (2009): 919-925.